Obispo defiende la labor de Profamilia en la educación sobre la sexualidad‏


EN SAN FRANCISCO DE MACORÍS: El Obispo Diocesano de la Iglesia Episcopal salió hoy en defensa de la Asociación Pro Bienestar de la Familia (Profamilia), por estimar que la educación sexual tanto para niños, adolescentes, jóvenes y adultos es fundamental.

El reverendo Julio Holguín Khoury sostuvo que en este tiempo, cuando hay tantas personas afectadas por enfermedades de transmisión sexual, como el VIH/SIDA y la sífilis, entre otras, hay que guiar a los jóvenes sobre las implicaciones y riesgos de las relaciones sexuales sin la debida protección y planificación.

Refirió que partiendo de esa realidad cree necesaria la educación sexual, tanto para niños, adolescentes, jóvenes y adultos, como llevó a cabo Profamilia con su campaña.


El obispo episcopal significó que tanto la familia, como las iglesias y los educadores, deben asumir la responsabilidad.

De igual modo estimó apropiado que los esposos tengan los hijos que estén en capacidad de alimentar y de educar. “Por lo tanto, creo que debe ser de libre elección el uso de los anticonceptivos”, indicó.
Holguín Khoury mostró preocupación por la inseguridad que vive la ciudadanía, y la atribuyó en parte a la corrupción y al mal ejemplo de los políticos y empresarios

Por otro lado Obispo Diocesano de la Iglesia Episcopal consideró inapropiado y por lo tanto no comparte la práctica injustificada de la interrupción de un embarazo, salvo que la ciencia médica determine que esté en riesgo la vida o la salud mental permanente de la embarazada.

“No comparto que las personas tengan relaciones sexuales prematrimoniales o extramaritales, pues este es un principio que se espera sea asumido por toda persona cristiana”, subrayó.

El reverendo Holguín Khoury cree que a quienes tienen la responsabilidad de orientar pastoralmente  a la gente, particularmente a jóvenes y adolescentes, no les corresponde condenar a quienes caigan en la tentación y lleven a la práctica ese tipo de comportamiento, incluyendo a una joven quede embarazada.

“Nuestra responsabilidad más bien es dar la asistencia pastoral que requiere toda persona, ante cualquier circunstancia, pues para eso es que somos representantes de Cristo”, expresó.

La delincuencia común y la corrupción

Al tratar sobre la delincuencia común y la inseguridad, el obispo Holguín Khoury mostró preocupación por la inseguridad que vive la ciudadanía, y la atribuyó en parte a la corrupción y al mal ejemplo de los políticos y empresarios.

Consideró que una de las causas de la inseguridad ciudadana está relacionada con el problema de la pobreza, la inequidad, la deuda social y el mal ejemplo de la corrupción burocrática y privada, hacia la cual la justicia resulta ser en la práctica muy tolerante.

“Y si a ello agregamos los bajos salarios que reciben los miembros de la Policía Nacional, sin importar el rango, lo cual hace que en vez de ser efectivos, sean inefectivos en el cumplimiento de su deber, de preservar la seguridad ciudadana”, puntualizó.

Asimismo, señaló que hay una responsabilidad compartida de la familia, ya sea por descuido, como por el mal ejemplo de  padres irresponsables, y del sistema educativo.

Argumentó que quienes están llamados a ser modelos y forjadores de los niños y jóvenes, en cuanto a la buena práctica de la ética ciudadana, la honradez y la honestidad, como los profesores, no están cumpliendo a plenitud con ese aspecto de sus responsabilidades.

“De igual modo ha fallado nuestro sistema judicial y penitenciario, ya que nuestras cárceles, en vez de contribuir significativamente a la rehabilitación de los internos, son en la mayoría de los casos centros en los cuales  aprenden nuevos métodos efectivos, para que no pocos de ellos vuelvan a delinquir, cuando son puestos en libertad”, dijo.

Citó que también las iglesias, particularmente sacerdotes y pastores, han descuidado su rol de guiar a las personas, para que mantengan los principios cristianos del amor al prójimo, el respeto a los derechos y los bienes de los demás.

Y finalmente el obispo diocesano se manifestó opuesto a la explotación de loma Miranda.
“Dios nos libre de que nuestros legisladores caigan en el grave error permitir, o de aprobar una propuesta en ese sentido, ya que con ello estarán afectando parte de las principales fuentes acuíferas del país”, advirtió.
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