Modernización del Estado y la Reforma en el Sector Salud
Por: Ismael Batista
El periodo presidencial 1996-2000 fue un cuatrienio en el cual surgieron reformas que marcarían la vida social y económica de la Republica Dominicana. Se dictaron decretos que implementarían las reformas y modernización del Estado dominicano. En efecto, en septiembres de 1996, un mes después, del presidente dominicano, Leonel Fernández, asumir la riendas del gobierno, fue creada la Comisión Presidencial para la Reforma y Modernización del Estado, constituida esta por los diferentes poderes del Estado y representantes de la sociedad, pero sería el Consejo Nacional de la Reforma del Estado que pondría en ejecución tan amplio programa de reformas que abarcaría todos los estamentos de la vida nacional.
Fueron creadas las diferentes comisiones de reformas y modernización. El país se transformaría. De Las reformas a implementar las de de mayor interés, serian la Comisión de Reforma de la Empresa Pública, que llevaría a cabo completamente su acometido, al igual que todas aquellas reformas que tenían que ver con la eficientizacion de las oficina recaudadoras del Estado.
Había entrado con gran fuerza en la republica Dominicana, en el primer periodo presidencial del ex presidente Leonel Fernández, el modelo económico neoliberal
Han transcurrido unos 16 anos de la implementación de las reformas del Estado sin que el país haya asimilado resultados favorables de las mismas. En primer lugar, por la limitación del espectro de acción, pues, áreas cardinales en las reformas verbigracia la agropecuaria, la educación, energía, entre otras, en las cuales las reformas no alcanzo llegar, y en segundo lugar, la falta de sinceridad y transparencia en el momento que se pactaron los acuerdos.
El fracaso de las reformas tendentes a la modernización de las instituciones del Estado, fue evidente en el sector salud, en el que fue creada, La Comisión Ejecutiva para la Reforma del Sector, la cual en sus inicios presagiaba un avance en la solución de la problemática de la salud en la Republica Dominicana, sin embargo, aquellas, atinadas reformas implementa en el sector se perdieron en el camino.
A pesar de ello, en la segunda mitad de la década de los 90s, la población dominicana conoció El Nuevo Modelo de Atención en Salud, un modelo que visualiza el individuo en la sociedad en una dimensión biosicosocial, preconiza la prevención y promoción de de los valores de la salud e integra el individuo y la comunidad en programas de salud con el objetivo de que ellos sean parte integral de los mismos.
El modelo plantea la conformación de estructuras gerenciales locales encaminadas a la descentralización de las funciones del sistema de salud como parte importante de la gestión de los programas de salud pública. Es lo que se estila en países con sistema de salud bastante avanzado como es el caso de Cuba y Chile en América Latina.
El Nuevo Modelo de Atención en Salud, es la vía para la desconcentración de los hospitales y el cambio de la obsoleta y costosa medicina curativa practicada en los hospitales del Estad por la medicina preventiva impulsada en el medio donde se desenvuelve cotidianamente el individuo, que es los más favorable para todo sistema de salud.
En el marco del derrotero que ha seguido la salud pública en la Republica Dominicana, no es ajeno a lo que estamos reseñando, el hecho de que en el 2001, con el lanzamiento del Sistema Dominicano de Seguridad Social en Barahona, se le asesto el golpe mortal al Nuevo Modelo de Atención en Salud.
En la actualidad, las Administradoras de Riesgo de Salud, brazo ejecutor del sector financiero del país, disponen de grandes cantidades de recursos económico para solventar, con muchas restricciones, los gastos de salud en gran parte del sector privado, pero no dispone de inversión en programas en materia de prevención o saneamiento ambiental.
En contraposición a lo que preconiza el Nuevo Modelo de Atención, el Sistema Dominicano de Seguridad Social enfoca el individuo en términos de cálculos matemáticos. Esta concepción de salubridad y la aplicación del Viejo Modelo, mantiene a los hospitales públicos abarrotados de enfermos, así como también, nuestros principales indicadores de salud, siguen siendo de los niveles más crítico de América Latina.
En pleno siglo 21, nuestro Viejo Modelo de Salud no fue capaz de tender un cordón sanitario en la frontera con Haití para impedir la entrada del dengue a la Republica Dominicana
Ismael Batista,
Reside en Barahona