Las implicaciones sociales de las Premiaciones Enriquillo de Oro‏


Por: R. A. López Ynoa

La Fundación Enriquillo de Oro, institución con sede en la ciudad de Barahona, y cuyo lema es “Honor al Hombre Suroestano” se prepara para la XII entrega de las premiaciones en la que se reconocerán los aportes en dieciséis renglones que abarcan un amplio abanico de actuaciones sociales y culturales del hombre suroestano y de la mujer y suroestana.

En este tipo de premiación en el que se busca el honor y la gloria frutos del reconocimiento social a una labor, que en la mayoría de las  veces, se realiza sin que se tenga la intención directa de ser reconocida, se valoran los aportes que un individuo, o una organización, o una institución, haya hecho a favor de tal o cual aspecto de la vida social de los pueblos.


Lo físico, si algún objeto se entrega, lo monetario, si lo hubiera, es sencillamente simbólico. Así ha sido desde siempre, desde que la sociedad encontró ese mecanismo para reconocer a sus hombres destacados y a sus mujeres destacadas.

Le decía al presidente de la Fundación Enriquillo de Oro, el doctor Néstor de Jesús Laurens, que esta vez la convocatoria a las XII premiaciones ha superado las expectativas y que el pueblo barahonero la ha acogido como, quizás, ninguna otra actividad cultural y social.

El inusitado vuelco de expectaciones y el fervor que ha generado esta actividad en parte se ha debido a la necesidad que tiene el humano de que se le reconozca, una necesidad que le viene desde su misma formación antropológica a lo largo de los siglos y/o  milenios.

En la ciudad de Barahona la posibilidad de satisfacer esta necesidad la brinda la Fundación Enriquillo de Oro con sus convocatorias anuales, y por eso no debería de extrañar que los barahoneros las hayan asumido como algo suyo, como algo que va más allá del 15 de marzo, fecha para la que se ha hecho la convocatoria en su XII edición.

Las Premiaciones Enriquillo de Oro han desbordado los límites de la fundación que las creó para convertirse en marca-Barahona, y por eso debería de estarse pensando en fortalecerla institucionalmente con patrocinios fijos e identificables.

Durante la rueda de prensa que ofrecieron los directivos de la Fundación Enriquillo de Oro para informar de la convocatoria a la XII edición de las premiaciones dijimos que con el sólo hecho de ser nominado en uno de los  renglones concursantes ya eso nos satisfacía porque era un paso previo a lo que pudiera convertirse en un reconocimiento definitivo por parte del jurado actuante.

Desde ya felicitamos a quienes sean galardonados en cada uno de los dieciséis renglones a los que se ha convocado porque, estamos seguros que su selección será más que merecida.


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