El caso de la Caja de Pandora en el oficialismo en Barahona‏

El diputado de la República por la provincia de Barahona, licenciado Mariano Montero, acaba de decir que en Barahona se ha abierto la Caja de Pandora en directa alusión al despido de que fueron objeto varios empleados de la Regional IV de Salud por parte del Ministerio de Salud Pública en la persona de su directora la doctora Nilda Pérez.

Específicamente dijo: “Este problema desató la Caja de Pandora”.

Quienes conocen el mito de la Caja de Pandora saben que Pandora era una mujer y que la caja que ésta portaba, y que no debía abrirse, contenía todos los males habidos y por haber. El único bien que contenía la caja era la “Esperanza”, pero estaba en el fondo.

Normalmente cuando alguien se refiere a este mito sólo toma en cuenta la caja, pero no a la mujer, para referirse a que tal o cual acción traerá males o desgracias.

Con sus palabras el diputado quizás quiso decir que las destituciones en la regional IV de Salud es sólo la tapa abierta de una caja que encierra una situación bullente y que de ahora en adelante el equilibrio que mantenía la estabilidad política en la provincia podría verse afectado.

El legislador oficialista da a entender que hay problemas en el oficialismo barahonero y que ante esta coyuntura saldrán a relucir otras situaciones.

Que las sustituciones hayan sido autorizadas, o recomendadas,  por altas instancias del Ministerio de Salud Pública, que éstas estén amparadas en un marco legal, no quita el hecho de que alguien levantó una tapa que no debió abrir olvidando que en la administración pública, y más en los pueblos,  todo es un engranaje y que todos los elementos, cual piezas de un reloj, están de una u otra manera, entrelazados.

Prueba de esto es que ya se está produciendo en Barahona lo que también se conoce como “el efecto mariposa” según el cual el aleteo de una mariposa en Japón puede producir una tormenta en los Estados Unidos.

O sea, elementos que en principio no se encuentran relacionados con la situación inicial terminan salpicados o afectados, quizás con mayor severidad, que los afectados inicialmente.

Algo que comienza aparentemente como una acción aislada, se desarrolla como una bola de nieve y termina afectando al colectivo.

Las aguas que hoy  amenazan con ser desbordadas con acontecimientos no previstos en el PLD en Barahona deben ser contenidas por alguien con autoridad política suficiente para que éstas se mantengan en  su cauce natural.

El equilibrio que mantenía la caja cerrada de Pandora en el peledeísmo barahonero debe ser mantenido y para esto se debe consensuar, se debe ser participativo, se debe partir del criterio de que para mantener la convivencia política se hace necesario el reparto del poder entre los distintos sectores que hicieron posible el triunfo peledeísta el 20 de  mayo pasado.

Por Ramón López Ynoa

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