Se nos fue un gran ser humano, el Dr. Sócrates Gatón

(Foto: Dr. Sócrates Gatón)



Por Vinicio López, Médico


Conocí al Dr. Sócrates Gatón en el año 1982 cuando ambos iniciábamos nuestros respectivos entrenamientos de estudios médicos especializados, él en Cirugía General y yo en Anestesiología. El vínculo entre estas dos especialidades nos hacía compartir largas horas en los quirófanos del Hospital Luis Eduardo Aybar y del Hospital Robert Read Cabral durante los períodos de rotación propios de las especialidades que desarrollábamos.

Nativo de San Francisco de Macorís, descendiente de una prestigiosa familia, su padre para entonces era propietario de una de las dos principales clínicas de su pueblo natal. Durante el último año de nuestros entrenamientos las relaciones fueron más estrechas, por compartir ambos el mérito de ejercer las funciones de Jefes de Residentes de nuestras respectivas especialidades.

Al titularnos ambos como especialistas cada uno tomamos rumbo hacia las provincias que nos vieron nacer. Tengo entendido que el Dr. Gatón desarrollaba un proyecto que era su gran sueño, la construcción de un centro médico privado. Al parecer los resultados no fueron los esperados, y su ejercicio médico fue desarrollándose en una de las provincias del Este del País, posteriormente pasó a San Juan de la Maguana, al Hospital Jaime Mota por un muy breve período, y finalmente se estableció en la provincia Pedernales como cirujano general y como Director del Hospital Elio Fiallo.

Su gran sensibilidad por aliviar el dolor de los más desposeídos le motivó siempre a realizar una gran labor social en esa empobrecida provincia, a la par que también fue un gran gremialista a favor de su clase médica. Siempre recibimos de él un trato amable, distinguido, cortés y muy fino, cualidades que le adornaban en su trato con casi todas las personas con las que interactuaba.

Paz a sus restos y que el Todopoderoso le haya perdonado ese momento de debilidad que le condujo a tan fatal decisión que nos enlutece a todos.