Tiempo para el Alma
Te levantas temprano, te cepillas la bocsa, desayunas y va tu trabajo. Almuerzas, cena, ve televisión, comparte con tus amigos en fiestas, parrandas y paseos playeros. Pero nunca tiene un momento con Dios, alegando falta de tiempo. Amigo medita bien, porque sería el mejor paso que puedes dar mientras vivas en este mundo.