La musa del neorrealismo italiano Gina Lollobrigida cumple mañana 85 años
Desde sus inicios fue muy admirada por su sensualidad
ROMA.- La actriz italiana Gina Lollobrigida, musa del neorrealismo italiano e icono sexual de la época dorada de Hollywood, con películas como "La burla del diablo" -protagonizada junto a Humphrey Bogart y con guion de Truman Capote-, cumple mañana 85 años tras una vida marcada por una fuerte vocación artística.
Nacida en Subiaco (a 70 kilómetros de Roma) el 4 de julio de 1927, Lollobrigida sufrió una infancia marcada por la posguerra y debutó en el cine tras comenzar sus estudios artísticos y darse a conocer en el concurso Miss Italia 1947, que ganó Lucía Bosé.
Desde sus inicios fue muy admirada por su sensualidad y se ganó el apodo de "maggiorata", que fue el término acuñado para designar a las voluptuosas actrices italianas de las décadas de los 50 y los 60 que encandilaban al público dentro y fuera de las pantallas, y que tiene en Lollobrigida y Sofía Loren a sus máximas representantes.
No obstante, la actriz romana -apodada "Lollo"- mantuvo siempre una personalidad fuerte y determinada y no abandonó las inquietudes artísticas de su adolescencia, el dibujo y la fotografía, en la que desarrolló una carrera paralela a su trayectoria cinematográfica, llegando a ejercer de reportera gráfica.
Entre sus primeras películas están "Corazón sin fronteras" (1949), de Luigi Zampa; "¡Cuidado, bandidos!" (1951), de Carlo Lizzani, y "Otros tiempos" (1952), de Alessandro Blasetti, con las que empezó a ser conocida fuera de las fronteras italianas.
Salió de su país de la mano del francés Christian-Jaque y protagonizó películas de todos los registros que la hicieron muy popular en Francia como "El gran juego" (1954), que interpretó junto a Jean-Claude Pascal, o "La ley" (1959), junto a Yves Montand.
Lollobrigida compaginó esas grabaciones con otras italianas: así, en estos años interpretó éxitos como "Pan, amor y celos" (1954), de Luigi Comencini, donde encarnaba a una joven que rompía la monótona vida de un pueblo remoto de los Abruzzos al iniciar un romance con un "carabinero" recién llegado, encarnado por Vittorio de Sica.
En su filmografía de más 60 películas las hay que no alcanzaron la fama, a pesar del tirón físico de la actriz, como sucedió con "La mujer más guapa del mundo" (1955), de Robert Z.Leonard.
Como su compatriota Sofía Loren, con la que "Lollo" mantuvo una fuerte rivalidad, la actriz formó parte de ese grupo de curvilíneas actrices italianas que hizo carrera en la época dorada de Hollywood en un momento en el que los contratos de exclusividad que las grandes compañías cinematográficas imponían a sus estrellas, sembraban sombras en un panorama aparentemente idílico.
Fue en Estados Unidos donde compartió guion con Frank Sinatra en "Cuando hierve la sangre" (1959) e interpretó la comedia romántica "Cuando llegue septiembre" (1961), en la mostraba al mundo con Rock Hudson una Italia despreocupada y alegre bajo la dirección de Robert Mulligan.
ROMA.- La actriz italiana Gina Lollobrigida, musa del neorrealismo italiano e icono sexual de la época dorada de Hollywood, con películas como "La burla del diablo" -protagonizada junto a Humphrey Bogart y con guion de Truman Capote-, cumple mañana 85 años tras una vida marcada por una fuerte vocación artística.
Nacida en Subiaco (a 70 kilómetros de Roma) el 4 de julio de 1927, Lollobrigida sufrió una infancia marcada por la posguerra y debutó en el cine tras comenzar sus estudios artísticos y darse a conocer en el concurso Miss Italia 1947, que ganó Lucía Bosé.
Desde sus inicios fue muy admirada por su sensualidad y se ganó el apodo de "maggiorata", que fue el término acuñado para designar a las voluptuosas actrices italianas de las décadas de los 50 y los 60 que encandilaban al público dentro y fuera de las pantallas, y que tiene en Lollobrigida y Sofía Loren a sus máximas representantes.
No obstante, la actriz romana -apodada "Lollo"- mantuvo siempre una personalidad fuerte y determinada y no abandonó las inquietudes artísticas de su adolescencia, el dibujo y la fotografía, en la que desarrolló una carrera paralela a su trayectoria cinematográfica, llegando a ejercer de reportera gráfica.
Entre sus primeras películas están "Corazón sin fronteras" (1949), de Luigi Zampa; "¡Cuidado, bandidos!" (1951), de Carlo Lizzani, y "Otros tiempos" (1952), de Alessandro Blasetti, con las que empezó a ser conocida fuera de las fronteras italianas.
Salió de su país de la mano del francés Christian-Jaque y protagonizó películas de todos los registros que la hicieron muy popular en Francia como "El gran juego" (1954), que interpretó junto a Jean-Claude Pascal, o "La ley" (1959), junto a Yves Montand.
Lollobrigida compaginó esas grabaciones con otras italianas: así, en estos años interpretó éxitos como "Pan, amor y celos" (1954), de Luigi Comencini, donde encarnaba a una joven que rompía la monótona vida de un pueblo remoto de los Abruzzos al iniciar un romance con un "carabinero" recién llegado, encarnado por Vittorio de Sica.
En su filmografía de más 60 películas las hay que no alcanzaron la fama, a pesar del tirón físico de la actriz, como sucedió con "La mujer más guapa del mundo" (1955), de Robert Z.Leonard.
Como su compatriota Sofía Loren, con la que "Lollo" mantuvo una fuerte rivalidad, la actriz formó parte de ese grupo de curvilíneas actrices italianas que hizo carrera en la época dorada de Hollywood en un momento en el que los contratos de exclusividad que las grandes compañías cinematográficas imponían a sus estrellas, sembraban sombras en un panorama aparentemente idílico.
Fue en Estados Unidos donde compartió guion con Frank Sinatra en "Cuando hierve la sangre" (1959) e interpretó la comedia romántica "Cuando llegue septiembre" (1961), en la mostraba al mundo con Rock Hudson una Italia despreocupada y alegre bajo la dirección de Robert Mulligan.