El grito fulmineo del obispo de Barahona contra troglodita Indrhi
Por: Reynaldo Hernandez Rosa
Luego de meses utilizando al solideo obispal de Barahona, su feligresía, campesinos, parceleros y lugareños, truena monseñor Rafael Leonidas Felipe, ante las burdas promesas del director del INDRHI en torno al inicio de los trabajos de la Presa de Monte Grande, donde lo único que se avisto fueron los gastos en correrías etílicas del troglodita del organismo oficial.
Utilizando la tiara católica para sus pretensiones electorales, donde fracasaron, pusieron al mitrado de marioneta, donde hasta los salones del obispado y la UTECA sirvieron de escenario para la farsa de Monte Grande, donde en medio de los buenos tragos del vodka, el flamante director del INDRHI pondero la visión del redentor del Sur, el príncipe Leonel Fernández.
Hoy, el obispo sureño implora al prostíbulo de la Feria, el Congreso Nacional, para que la esperada obra de Monte Grande sea realidad, observando la toma de pelo que hizo el gobierno y sus funcionarios con la pobreza de la gente del lejano Sur.
Al igual que la mayoría de los dominicanos, el obispo de Barahona, espera la destitución de todos los hoy millonarios funcionarios de la cúpula morada, la cual si logro reducir su vaciedad estomacal y pecuniaria.
Escrito por: Reynaldo Hernandez Rosa
Luego de meses utilizando al solideo obispal de Barahona, su feligresía, campesinos, parceleros y lugareños, truena monseñor Rafael Leonidas Felipe, ante las burdas promesas del director del INDRHI en torno al inicio de los trabajos de la Presa de Monte Grande, donde lo único que se avisto fueron los gastos en correrías etílicas del troglodita del organismo oficial.
Utilizando la tiara católica para sus pretensiones electorales, donde fracasaron, pusieron al mitrado de marioneta, donde hasta los salones del obispado y la UTECA sirvieron de escenario para la farsa de Monte Grande, donde en medio de los buenos tragos del vodka, el flamante director del INDRHI pondero la visión del redentor del Sur, el príncipe Leonel Fernández.
Hoy, el obispo sureño implora al prostíbulo de la Feria, el Congreso Nacional, para que la esperada obra de Monte Grande sea realidad, observando la toma de pelo que hizo el gobierno y sus funcionarios con la pobreza de la gente del lejano Sur.
Al igual que la mayoría de los dominicanos, el obispo de Barahona, espera la destitución de todos los hoy millonarios funcionarios de la cúpula morada, la cual si logro reducir su vaciedad estomacal y pecuniaria.
Escrito por: Reynaldo Hernandez Rosa