DANILO, EL SUR Y LA PORTUNIDAD DE ORO
Por: Lic. Emilio Saviñón
A partir del 16 de agosto próximo, el país estará estrenando un nuevo mandato constitucional, encabezado por el presidente electo Danilo Medina y la actual primera Dama, Doctora Margarita Cedeño de Fernández. Gran expectativa se ha creado en relación al modelo de Gobierno que pueda implementar esta administración.
Sin embargo, esperamos que sean cuatro años de prosperidad y bienestar para los dominicanos, en especial para esta olvidada región Sur que por décadas, solo promesas ha recibido por los diversos gobiernos que hasta la fecha han administrado el estado.
El Sur tiene la oportunidad de Oro, faltaría saber con certeza, si existe o no la fuerza de voluntad y la firme decisión del presidente, de inclinar el gobierno en favor de esta querida y anhelada región, de la cual él forma parte.
Nuestra empobrecida Región necesita la ejecución de políticas públicas, en aras de disminuir el alto índice de atraso estructural, marginación o exclusión social entre otros factores latentes.
Se requieren de la intervención de un gobierno de rostro humano, de un Sureño que se identifique con la problemática y sobre todo que conozca la importancia de los hombres y mujeres, dispuestos a enfrentar la cruda realidad de pobreza material, que solo se logra en la medida que el estado proporcione los medios para lograr el desarrollo sostenible de la Zona.
A partir del 16 de agosto próximo, el país estará estrenando un nuevo mandato constitucional, encabezado por el presidente electo Danilo Medina y la actual primera Dama, Doctora Margarita Cedeño de Fernández. Gran expectativa se ha creado en relación al modelo de Gobierno que pueda implementar esta administración.
Sin embargo, esperamos que sean cuatro años de prosperidad y bienestar para los dominicanos, en especial para esta olvidada región Sur que por décadas, solo promesas ha recibido por los diversos gobiernos que hasta la fecha han administrado el estado.
El Sur tiene la oportunidad de Oro, faltaría saber con certeza, si existe o no la fuerza de voluntad y la firme decisión del presidente, de inclinar el gobierno en favor de esta querida y anhelada región, de la cual él forma parte.
Nuestra empobrecida Región necesita la ejecución de políticas públicas, en aras de disminuir el alto índice de atraso estructural, marginación o exclusión social entre otros factores latentes.
Se requieren de la intervención de un gobierno de rostro humano, de un Sureño que se identifique con la problemática y sobre todo que conozca la importancia de los hombres y mujeres, dispuestos a enfrentar la cruda realidad de pobreza material, que solo se logra en la medida que el estado proporcione los medios para lograr el desarrollo sostenible de la Zona.