Ayuntamiento ni Salud Pública controlan la venta de carnes de cerdo y res
Azua, Rep. Dominicana.- Sin ninguna regulacion ni control y sin una supervision adecuada este municipio tienes una cantidad considerable de carnecerias, donde la poblacion se abastece de carne de res y de cerdo.
Los laboriosos hombres que prestan este servio a la poblacion no tienen ninguna regulacion por parte de las instituciones que deben velar por que a los consumidores llegue un producto bajo las mas estricta norma de calidad y de higiene.
La carne de cerdo o de vaca pasa horas y hora a la interperie en un permanente contacto con el monocido de calbon que emana de los vehiculos, el polvo de la calle y otros contaminantes.
En cada carniceria se evidencia un ausencia de higiene, la cual pasa desapercibida por los compradores de carne que tal vez no saben que un mal dia podria adquirir una enfermedad
El ayuntamiento Municiapal y Salud Publica debe crear algun mecanismo de proteccion al consumidor sin perjudicar a los hombres que tiene la venta de carne como el trabajo productivo para mantien sus familias.
El ayuntamiento no regula ni controla el sacrificio de animales para la venta de carne en esta ciudad, otra institucion que no funciona es salud publica, la cual debe velar por que los animales para el sacrificio reunan las condiciones de sanidad necesaria para que la poblacion consuma un producto acto para el consumo
El alcalde de esta ciudad Rafael Hidalgo Fernandez tiene en sus manos conjutamente con los regidores la oportunidad de dignificar a los carniceros de los barrios proporcionandole una caseta adecuada e higienica, al tiempo que cobran los impuestos correspondientes y exigen el uso de los servicios del matadero municipal.
Por Hector J. Caamaño
Los laboriosos hombres que prestan este servio a la poblacion no tienen ninguna regulacion por parte de las instituciones que deben velar por que a los consumidores llegue un producto bajo las mas estricta norma de calidad y de higiene.
La carne de cerdo o de vaca pasa horas y hora a la interperie en un permanente contacto con el monocido de calbon que emana de los vehiculos, el polvo de la calle y otros contaminantes.
En cada carniceria se evidencia un ausencia de higiene, la cual pasa desapercibida por los compradores de carne que tal vez no saben que un mal dia podria adquirir una enfermedad
El ayuntamiento Municiapal y Salud Publica debe crear algun mecanismo de proteccion al consumidor sin perjudicar a los hombres que tiene la venta de carne como el trabajo productivo para mantien sus familias.
El ayuntamiento no regula ni controla el sacrificio de animales para la venta de carne en esta ciudad, otra institucion que no funciona es salud publica, la cual debe velar por que los animales para el sacrificio reunan las condiciones de sanidad necesaria para que la poblacion consuma un producto acto para el consumo
El alcalde de esta ciudad Rafael Hidalgo Fernandez tiene en sus manos conjutamente con los regidores la oportunidad de dignificar a los carniceros de los barrios proporcionandole una caseta adecuada e higienica, al tiempo que cobran los impuestos correspondientes y exigen el uso de los servicios del matadero municipal.
Por Hector J. Caamaño