Trabajo Político versus esttategia del viento

Por Mayobanex De Jesús Laurens.

El notable ascenso de Danilo Medina en las encuestas y la baja experimentada por Hipólito Mejía en las mismas tienen una explicación teórica, basada en los esquemas de estrategias de campaña que sus equipos de direcciónes han implementado desde mayo del 2011 hasta la fecha.

Danilo Medina y sus estrategas han establecido como plataforma política dividir la campaña en varias etapas. En la primera fase se procuraba lograr la unificación del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) con la conformación de los comandos de campaña a nivel nacional, logrando integrar en ellos a todos los dirigentes de su partido.

La segunda etapa consistió en recorrer todas las provincias del país para juramentar los equipos de campaña en cada demarcación geográfica. Ese proceso fue enlazado con la primera parte de la campaña de imagen en los medios de comunicaciones, y en forma gráfica, dando a conocer el eje central de la propuesta programática del candidato: "corregir lo que está mal, continuar lo que está bien y hacer lo que nunca se hizo".

La tercera etapa del candidato presidencial del PLD estuvo dirigida a las labores internas del partido en asuntos de trabajos electorales con su mebresía. Todos los peledeístas a nivel nacional tuvieron que verificar sus comités de bases y tener el contacto con sus miembros, a la vez que esos datos eran digitados en una base de datos que la dirección de esa entidad partidaria manejaba, inclusive el propio candidato.

La cuarta fase estuvo encaminada a buscar un candidato vicepresidencial a través del sistema de encuestas, presentando a varios altos dirigentes del PLD al escrutinio del pueblo. Margarita Cedeño de Fernández salió disparada con altos porcentajes en todas las que que se encomendaron realizar, siendo seleccionada por Danilo Medina como su compañera de fórmula.

Esa cuarta fase terminaría en diciembre con una gran marcha caravana en Santo Domingo, en la cual participarían los candidatos y el propio presidente del partido, y gobernante de la nación, el doctor Leonel Fernández Reyna.

De su lado, Hipólito Mejía y su equipo de campaña fundamentaron sus estrategias políticas en el "soplar de los vientos", moviéndose a favor de la brisa del momento.

Los fuertes vientos estuvieron desde mayo a septiembre soplando a favor del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y su candidato presidencial. Los hechos de violencia registrados, los continuos incrementos de los precios de los combustibles, los casos de drogas escenificados, el denominado "paquetazo fiscal" y la campaña negativa con los supuestos casos de corrupción soplaron a favor de Mejía durante ese tiempo.

La dirigencia del PRD fue favorecida con varias encuestas a destiempo que dieron a Hipólito Mejía favorito para ganar las elecciones, con diferencias que oscilaban entre 7, 9, 14, y hasta 20 puntos sobre Danilo Medina en ese período.

Considerando como válida la "estrategia del viento", el equipo de campaña perredeísta entendió que la diferencia era irreversible y que no debían exponer a su candidato a cuestionamientos de la prensa nacional, para evitar las pifias de las carencias de argumentos que les son intrínsecas, enviándolo al exterior por varias semanas.

Mientras Mejía pernoctaba en ultramar, el candidato oficialista utilizaba las encuestas que les estaban desfavoreciendo para trabajar sobre ellas, haciendo los correctivos de lugar y coordinando con las autoridades gubernamentales para corregir lo que el pueblo demandaba.

A su retorno a Dominicana, ya las encuesta empezaban a marcar una tendencia: Danilo subía e Hipólito descendía. Los estrategas del PRD entendieron de inmediato que debían sacudir al partido y su militancia, y comenzaron a recorrer el país con sus candidatos presidencial y vicepresidencial, situación que se produjo hasta diciembre.

Los equipos de campaña de ambos candidato aprovecharon el mes navideño para continuar con sus estrategias de trabajo, ahora renovadas, entendiendo que algunas cosas tenían que cambiar.

Danilo Medina hizo cambios de imagen y contenido. Sin dejar el eslogan anterior, se incluyó el mensaje: "el mejor cambio, el cambio seguro", mientras que Hipólito continuó con "llegó papá", sin modificaciones programáticas.

Las encuestas de enero y febrero generaron el pánico en la dirigencia del PRD, en su candidato y el equipo de campaña de esa organización política. Pen Schoen Berland, Insight, S.A., Benenson Strategy Group, Asisa Research Group y Hamilton Campaigns mostraron difencias entre 3 y 7 puntos a favor de Danilo Medina.

A pesar de los resultados de esas firmas encuestadoras de prestigio internacional, Hipólito Mejía y sus estratategas insistieron con otras firmas encuestadoras, tales como el Centro Económico del Cibao y una nueva que se agregó de nombre Benedixen, las cuales reflejaron números dispares a favor de Mejía.

Desde mediados de enero hasta la fecha, tanto el PLD como el PRD están basando sus estrategias en actividades de masas, juramentaciones de contrarios, adhesión de aliados, asuntos electorales y manejo de los medios de comunicaciones.

Danilo Medina ha sumado 13 partidos aliados, incluyendo la parte institucional del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC). En tanto que Hipólito Mejía ha integrado a su campaña a 6 partidos que les apoyan.

El panorama seguirá igual hasta mayo. Si el viento se mueve con fuerzas hacia el PRD, por errores del gobierno, choques económicos externos o denuncias de actos ilícitos demostrables, Mejía sería beneficiado.

Si por el contrario, el viento se mantiene como brisa suave, el gobierno se maneja sin errores y no se producen cambios en el ámbito económico que afecten la imagen del candidato peledeísta, es difícil cambiar el curso de lo que ya reflejan todas las encuestas de prestigio, un triunfo de Danilo Medina en primera vueltata.
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