Curiosidades de Carlos Gardel

Coincidencias numéricas: Carlos Gardel toda su vida fue muy supersticioso, y el tema números era importantísimo para él.

Su chófer, Sumaje era un obsesionado de la numerología. Dícese que fue él quien convenció al cantor que su número era el cuarenta y ocho, el famoso “morto chi parla”. Y algo de eso debe ser cierto porque seguía dicha cifra, ya fuera en las carreras de caballos, la quiniela, las habitaciones de hotel, etcétera. Por ejemplo, la mesa de bar El Tropezón que estaba reservada permanentemente a su nombre, era la 48.

La pidió por primera vez en el local de Callao y Cangallo. El techo se hundió en 1925 sobre ella, una noche que él y sus amigos se ausentaron por pura casualidad. El bar se mudó a un local en calle Callao 248.

El 48 también fue como el sino de su muerte. Si sumamos las cifras del año del accidente, 1935, 1+9+3+5=18, más el mes, 6, da como resultado 24, que sumado al día de la muerte, 24, resulta: 48.

Pero a su vez, al restar 1935 menos 1887, el año de nacimiento declarado en su pasaporte, da como resultante… 48, “il morto chi parla”.

Pero hay más: el número de la cédula de identidad de Berthé Gardés (ver foto) está compuesto por un 4 seguido de 24-6-35, es decir la fecha exacta de la muerte de Carlos Gardel.

Si sumamos los número del documento de Berta, 4+2+4+6+3+5, da como resultado 24, número del día de la muerte del Zorzal, que a su vez es la mitad de 48, su número cabalístico.

Casualidades.

Marcelo O. Martínez
www.gardel.es

(Foto: Bertha Gardel, madre de Carlos Gardel)