Petronila Familia, 70 años apresada por soborno a favor de un hijo detenido por drogas.
Por Alejandro Santana
El caso ocurrió en San Juan de la Maguana; todos conocemos el amor de las madres hacia sus hijos, un amor ciego, en ocasiones irracional que no admite razonamientos positivos, es amor de madre y todos sabemos lo poderoso que es.
Pero, Petronila Familia se equivocó, ofreció dinero por la puesta en libertad de su hijo Julio Antonio Fermín apresado por posesión de marihuana, ella y todos sabemos que eso ocurre, que se hace que se acepta soborno, pero no reparó en la cantidad, ofreció lo que podía conseguir para ver a su hijo en libertad.
Esa señora de 70, se equivocó, no en su gestión, se equivocó en la suma y es posible que en su desesperación lo hiciera de manera publica y por eso, los agentes de drogas reaccionaron de esa manera que muchos dirán que fue honesta.
Pero no es así, lamentablemente, la señora no tenia cincuenta mil, cien o ciento cincuenta, que es la suma por la cual se negocian las libertades de los apresados por marihuana.
No estoy mintiendo, así pasa, no en San Juan de la Maguana, pasa en la capital, en esta ciudad, en Pedernales, y es posible que en cualquier parte del territorio donde esté la presencia de los agentes antidrogas.
Es un secreto a voces, se recibe dinero en esa instancia antidroga, pero no se recibe chele, se negocia por sumas que alcance para repartir buenas tajadas entre socios y esas tajadas en ocasiones llegan hasta a adjuntos del ministerio público, pero no trasciende por temor.
Si por temor, porque en la lucha por controlar el microtráfico de drogas, se cometen abusos y en esos abusos hay ministerio público involucrado, pero todos tenemos miedo en decirlo y llevarlo a instancias siquiera par escandalizar.
Ahora la señora Petronila Familia, una madre de 70 años será llevada ante un juez, ojala que sea un juez serio y que su condición de madre sea tomada en cuenta.
Que se le haga saber que lo que hizo no es correcto, que esa suma de dinero no es suma para negociar, que no se le apliquen sanciones que se entienda lo que significa el amor de una madre y que a su vástago se le imponga presentación periódica.
Y que esa ínfima suma que posee, la dedique para acudir a un especialista con conciencia para que le ayude a curar su hijo de esa adicción fatal, de consumir o entender que el dinero conseguido por esa vía es beneficioso.
Y a los antidrogas que dejen ese show de mal gusto, que todos sabemos que aquí se negocia libertad por dinero, claro no por cheles, pero que entiendan que la señora madre fue sincera. OFRECIO LO QUE TENIA.
El caso ocurrió en San Juan de la Maguana; todos conocemos el amor de las madres hacia sus hijos, un amor ciego, en ocasiones irracional que no admite razonamientos positivos, es amor de madre y todos sabemos lo poderoso que es.
Pero, Petronila Familia se equivocó, ofreció dinero por la puesta en libertad de su hijo Julio Antonio Fermín apresado por posesión de marihuana, ella y todos sabemos que eso ocurre, que se hace que se acepta soborno, pero no reparó en la cantidad, ofreció lo que podía conseguir para ver a su hijo en libertad.
Esa señora de 70, se equivocó, no en su gestión, se equivocó en la suma y es posible que en su desesperación lo hiciera de manera publica y por eso, los agentes de drogas reaccionaron de esa manera que muchos dirán que fue honesta.
Pero no es así, lamentablemente, la señora no tenia cincuenta mil, cien o ciento cincuenta, que es la suma por la cual se negocian las libertades de los apresados por marihuana.
No estoy mintiendo, así pasa, no en San Juan de la Maguana, pasa en la capital, en esta ciudad, en Pedernales, y es posible que en cualquier parte del territorio donde esté la presencia de los agentes antidrogas.
Es un secreto a voces, se recibe dinero en esa instancia antidroga, pero no se recibe chele, se negocia por sumas que alcance para repartir buenas tajadas entre socios y esas tajadas en ocasiones llegan hasta a adjuntos del ministerio público, pero no trasciende por temor.
Si por temor, porque en la lucha por controlar el microtráfico de drogas, se cometen abusos y en esos abusos hay ministerio público involucrado, pero todos tenemos miedo en decirlo y llevarlo a instancias siquiera par escandalizar.
Ahora la señora Petronila Familia, una madre de 70 años será llevada ante un juez, ojala que sea un juez serio y que su condición de madre sea tomada en cuenta.
Que se le haga saber que lo que hizo no es correcto, que esa suma de dinero no es suma para negociar, que no se le apliquen sanciones que se entienda lo que significa el amor de una madre y que a su vástago se le imponga presentación periódica.
Y que esa ínfima suma que posee, la dedique para acudir a un especialista con conciencia para que le ayude a curar su hijo de esa adicción fatal, de consumir o entender que el dinero conseguido por esa vía es beneficioso.
Y a los antidrogas que dejen ese show de mal gusto, que todos sabemos que aquí se negocia libertad por dinero, claro no por cheles, pero que entiendan que la señora madre fue sincera. OFRECIO LO QUE TENIA.