LOS CAVERNARIOS DE LA PN SE TRASLADAN A SANTIAGO: Cacerolazo en Los Ciruelitos termina a bombazos
Santiago. Con enfrentamientos entre policías y manifestantes concluyó el cacerolazo contra el hambre que organizaron este domingo sectores feministas del Partido Revolucionario Dominicano, en la comunidad Los Ciruelitos.
En la manifestación resultaron afectadas por gases lacrimógenos, incluido niños y ancianos. También cinco personas fueron apresadas.
En principio se trató de una marcha que recorrió calles de la barriada ubicada al norte de Santiago, subió por la avenida Hatuey, pero cuando intentaron llegar a la Estrella Sadhalá fueron impedidos por los policías.
Al menos diez personas afectados por los gases fueron hospitalizados. El cacerolazo lo encabezó la ex vice ministra de la Mujer y actual regidora, Amarilis Baret, quien fue agredida supuestamente por un mayor de la policía.
Entre los apresados figuran niños de tres y cuatro años de edad quienes junto a sus padres fueron montados en los vehículos policiales.
Molestos por la acción policial, los residentes en la barriada tomaron las calles e incendiaron neumáticos y lanzaron tiros y pedradas contra los agentes.
Baret consideró como un abuso de las autoridades los golpes propinados a algunos de los revoltosos.
En la manifestación resultaron afectadas por gases lacrimógenos, incluido niños y ancianos. También cinco personas fueron apresadas.
En principio se trató de una marcha que recorrió calles de la barriada ubicada al norte de Santiago, subió por la avenida Hatuey, pero cuando intentaron llegar a la Estrella Sadhalá fueron impedidos por los policías.
Al menos diez personas afectados por los gases fueron hospitalizados. El cacerolazo lo encabezó la ex vice ministra de la Mujer y actual regidora, Amarilis Baret, quien fue agredida supuestamente por un mayor de la policía.
Entre los apresados figuran niños de tres y cuatro años de edad quienes junto a sus padres fueron montados en los vehículos policiales.
Molestos por la acción policial, los residentes en la barriada tomaron las calles e incendiaron neumáticos y lanzaron tiros y pedradas contra los agentes.
Baret consideró como un abuso de las autoridades los golpes propinados a algunos de los revoltosos.