TEUDDY SÁNCHEZ: Una vida de ejemplar al servicio de su comunidad
El próximo 15 de enero arribo a los 19 años colaborando desde Barahona al periódico El Nacional.
“Afirman eran dominicanos, siete matan restaurant EU”, fue la primera nota publicada en las paginas del rotativo.
La crónica aún la conservo, que hasta laminada está, colocada en la pared de mi humilde vivienda, que a muchos sorprende el valor dado a esta publicación que inició mi colaboración en El Nacional.
Mi ingreso al Nacional tiene agradecimiento a varias personas; iniciando en Barahona por Genao Contreras, quien me motivó a buscar la corresponsalía dejada por el decano Luis López Méndez.
Mis primeros contactos vía telefónica fueron hechos con una persona determinante para mi ingreso a El Nacional, el jefe de redacción de entonces Félix Gómez.
Le comuniqué a Gómez que era estudiante de Comunicación Social en la extensión de la Universidad Autónoma de Santo Domingo en Barahona y tenía el deseo de ir enrolándome en los medios, pero me dijo que por el momento no querían un corresponsal en Barahona.
A pesar de la repuesta negativa del señor Gómez, no fue un obstáculo para yo no seguir con mi idea de ingresar al periódico, pues me trasladé a Santo Domingo y en su oficina hablé con mas calma con el, donde me conoció y medio la oportunidad hasta el día de hoy.
En el trayecto de estos 19 años, debo agradecer la confianza depositada por el director del Nacional, Don Radhames Gómez Pepín, quien nunca ha dudado de una información que he enviado a la redacción, donde ha reconocido mi colaboración.
A don Bolívar Díaz Gómez, es otra persona que tengo que agradecerle, y aunque ya no esta en El Nacional, a Domingo del Pilar, una persona afable, y que en una ocasión le pregunté de que si fue corresponsal por el trato que me dispensaba.
Es bueno el momento de externar mi agradecimiento a El Nacional, cuando tuve mis problemas de salud, en febrero pasado por las publicaciones de que requería un Marca Pasos con un valor de 18 mil dólares, que gracias al Presidente Leonel Fernández y la diputada Noris Medina fue posible obtenerlo.
No debo terminar de escribir estas líneas sin citar el nombre de José Miguel Montero por su amistad y su preocupación en esos 24 días ingresado en Cedimat.