"¡Hipólito, apriete arriba, que nosotros apretamos abajo!", gritó la señora Luz Divina
AZUA, República Dominicana.- “¡Las mujeres de Tábara Arriba estamos locas por ver el triunfo de Hipólito Mejía! ¡Compañero Hipólito apriete arriba, que nosotros apretamos abajo!”.
Emocionada, sudorosa, Luz Divina Frías, representante del sector femenino, saludó el sábado la presencia del candidato del Partido Revolucionario Dominicano en su Distrito Municipal, Tábara Arriba, y con entusiasmo habló de las bondades del candidato y de las carencias que tienen las mujeres de ese apartado rincón de Azua.
El fin de semana Hipólito Mejía recorrió cada rincón de esta provincia, y en su primer día lo hizo acompañado de una comitiva que incluía a los dirigentes locales del PRD, además de numerosos dirigentes reformistas que se integraron a su campaña. Además varios integrantes de su equipo de campaña y dos periodistas invitados del candidato: Miguel Guerrero, productor de televisión, y quien escribe, director de Acento.com.do.
El programa del sábado, con más de 30 puntos, incluida la salida a las 6 de la mañana, y el desayuno en el Cruce de Ocoa, inició políticamente la campaña en el Distrito Municipal Guayabal, en las lomas de Azua, en colindancia con Constanza. Hasta ese lugar pocos candidatos presidenciales han llegado.
Desde Las Lagunas y El Naranjo, a 10 kilómetros, bajaron representantes comunitarios. Todos pertenecen al Distrito Municipal La Siembra. Hablaron los representantes de los jóvenes, de las mujeres y el encargado de campaña de Guayabal, y todos dijeron que Mejía fue quien hizo las calles, puso la energía eléctrica, hizo los contenes y llevó los invernaderos al lugar.
Desde esta comunidad comenzaron a expresarse dirigentes reformistas en apoyo a Mejía. Oscar Darío Beltré, del PRSC, dijo al candidato del PRD: “Lo apoyamos porque usted representa el cambio y el pensamiento de nuestro líder y guía Joaquín Balaguer”.
“Leonel Fernández no ha hecho nada por nosotros –dijo ante una multitud de cientos de personas-. Sólo nos llega la luz y es muy cara. Llenaremos las urnas de votos blancos. Necesitamos la carretera y el puente, necesitamos el mantenimiento del camino vecinal Guayabal-Constanza, necesitamos invernaderos, la extensión de la Tarjeta Solidaridad, la clínica de El Recodo y la carretera Guayabal-El Recodo, además del proyecto Agua de las Piedras”.
Mejía, que demostró conocer el lugar y algunas personas de allí, porque en los años 60 trabajó como agrónomo en las zonas rurales de Azua, habló de sus amigos en Guayabal, elogió a las hermosas jóvenes, además de sus amigos, “los viejevos”. “Mi pueblito de Guayabal…René Morillo te veo ahorita. Aquí viví mucho tiempo. No tengan dudas de que voy a cumplir. No habrá profesionales sin empleos, jóvenes sin universidades y sin guaguas para su transporte. Tengan paciencia y no se me muden de aquí. Los invernaderos los vamos a hacer, terminaremos la carretera, multiplicaremos los buenos maestros, la clínica rural será reparada y habrá médicos y medicamentos”.
Con tono paternal y en un discurso breve Mejía explicó su compromiso con los productores, y definió a Azua como su provincia adoptiva y a Guayabal como “mi campito”. Dijo que visitaría Monte Bonito, La Siembra, Las Lagunas. Y de inmediato pasó a juramentar a los reformistas que le apoyan. A las 10:30 de la mañana ya estaba saliendo de las montañas camino a Padre Las Casas.
Emocionada, sudorosa, Luz Divina Frías, representante del sector femenino, saludó el sábado la presencia del candidato del Partido Revolucionario Dominicano en su Distrito Municipal, Tábara Arriba, y con entusiasmo habló de las bondades del candidato y de las carencias que tienen las mujeres de ese apartado rincón de Azua.
El fin de semana Hipólito Mejía recorrió cada rincón de esta provincia, y en su primer día lo hizo acompañado de una comitiva que incluía a los dirigentes locales del PRD, además de numerosos dirigentes reformistas que se integraron a su campaña. Además varios integrantes de su equipo de campaña y dos periodistas invitados del candidato: Miguel Guerrero, productor de televisión, y quien escribe, director de Acento.com.do.
El programa del sábado, con más de 30 puntos, incluida la salida a las 6 de la mañana, y el desayuno en el Cruce de Ocoa, inició políticamente la campaña en el Distrito Municipal Guayabal, en las lomas de Azua, en colindancia con Constanza. Hasta ese lugar pocos candidatos presidenciales han llegado.
Desde Las Lagunas y El Naranjo, a 10 kilómetros, bajaron representantes comunitarios. Todos pertenecen al Distrito Municipal La Siembra. Hablaron los representantes de los jóvenes, de las mujeres y el encargado de campaña de Guayabal, y todos dijeron que Mejía fue quien hizo las calles, puso la energía eléctrica, hizo los contenes y llevó los invernaderos al lugar.
Desde esta comunidad comenzaron a expresarse dirigentes reformistas en apoyo a Mejía. Oscar Darío Beltré, del PRSC, dijo al candidato del PRD: “Lo apoyamos porque usted representa el cambio y el pensamiento de nuestro líder y guía Joaquín Balaguer”.
“Leonel Fernández no ha hecho nada por nosotros –dijo ante una multitud de cientos de personas-. Sólo nos llega la luz y es muy cara. Llenaremos las urnas de votos blancos. Necesitamos la carretera y el puente, necesitamos el mantenimiento del camino vecinal Guayabal-Constanza, necesitamos invernaderos, la extensión de la Tarjeta Solidaridad, la clínica de El Recodo y la carretera Guayabal-El Recodo, además del proyecto Agua de las Piedras”.
Mejía, que demostró conocer el lugar y algunas personas de allí, porque en los años 60 trabajó como agrónomo en las zonas rurales de Azua, habló de sus amigos en Guayabal, elogió a las hermosas jóvenes, además de sus amigos, “los viejevos”. “Mi pueblito de Guayabal…René Morillo te veo ahorita. Aquí viví mucho tiempo. No tengan dudas de que voy a cumplir. No habrá profesionales sin empleos, jóvenes sin universidades y sin guaguas para su transporte. Tengan paciencia y no se me muden de aquí. Los invernaderos los vamos a hacer, terminaremos la carretera, multiplicaremos los buenos maestros, la clínica rural será reparada y habrá médicos y medicamentos”.
Con tono paternal y en un discurso breve Mejía explicó su compromiso con los productores, y definió a Azua como su provincia adoptiva y a Guayabal como “mi campito”. Dijo que visitaría Monte Bonito, La Siembra, Las Lagunas. Y de inmediato pasó a juramentar a los reformistas que le apoyan. A las 10:30 de la mañana ya estaba saliendo de las montañas camino a Padre Las Casas.