Familiares de mujer acusan a cirujano de causarle lamuerte
SANTIAGO.- Los familiares de Dora Suero, de 47 años, que murió cuando supuestamente le practicaban una liposucción en una clínica advirtieron que no quedará impune.
Vivía en Hato Mayor y según sus familiares murió de manera extraña porque su cadáver fue encontrado en Patología Forense, donde habría sido llevado por instrucciones aparentemente del doctor Oscar Polanco, propietario de la clínica Ideamet donde se realizó la cirugía estética.
Indicaron que esta habría pagado 135 mil pesos al cirujano plástico, por practicarle dicha operación.
“Cómo es que ella salió de su casa y la encontramos aquí en la morgue como una huérfana. Ella Salió de su casa con una supuesta amiga, para un clínica de un cirujano plástico, sin avisarnos. Nosotros pedimos justicia y queremos que ese doctor de la cara y nos explique qué fue lo que pasó y nos muestre los exámenes que le practico antes de la cirugía”, dijo su hijo Jimmy Suero.
Expresó que se perdieron 200 mil pesos, su cartera y su celular, ni menos nadie que diga que andaba con ella y hacerse responsable.
También los vecinos sostuvieron que Suero, quien llegó hace 3 meses de Alemania donde residía con dos hijas, les había hablado de su decisión de hacerse una operación, pero no sabían la hora ni el día.
Aclararon que era cierto que los familiares no estaban informados de su idea de operarse.
“Ella estaba por hacérsela y por no hacérsela, era como a escondidas de su madre y de su hijo. Entonces ella se fue con una amiga, pero no sabemos quién era esa amiga que le aconsejo que se la hiciera”, dijo la vecina Maritza Hernández.
Observó que el lunes bien temprano en la mañana ella salió y que al notar que no llegó, se preocupó al igual que los demás de la pensión donde estaba viviendo en Hato Mayor, y que se enteraron de su muerte a través de un hermano.
“Ella vino a hacer unas cuantas diligencias, como hacer una casita para dejársela a su hijo pero en eso ella habló de su operación. Lo que sí te puedo decir es que ella como que se deprimía mucho por todos los compromisos y todas esas diligencias con la casa que tenía que hacer, ya que supuestamente le cobraban mucho por construirla”, dijo.
Manifestó que era una mujer llena de vida, sana y que en los meses que la vio en la pensión era muy tranquila.
El cadáver de la mujer fue entregado anoche a sus familiares, y hoy será sepultada en el Cementerio Municipal de Sosua, de donde era oriunda.
El caso está siendo investigado por la Policía Nacional para establecer responsabilidades y establecer si se trató de una cirugía estética o de un crimen planificado.
Vivía en Hato Mayor y según sus familiares murió de manera extraña porque su cadáver fue encontrado en Patología Forense, donde habría sido llevado por instrucciones aparentemente del doctor Oscar Polanco, propietario de la clínica Ideamet donde se realizó la cirugía estética.
Indicaron que esta habría pagado 135 mil pesos al cirujano plástico, por practicarle dicha operación.
“Cómo es que ella salió de su casa y la encontramos aquí en la morgue como una huérfana. Ella Salió de su casa con una supuesta amiga, para un clínica de un cirujano plástico, sin avisarnos. Nosotros pedimos justicia y queremos que ese doctor de la cara y nos explique qué fue lo que pasó y nos muestre los exámenes que le practico antes de la cirugía”, dijo su hijo Jimmy Suero.
Expresó que se perdieron 200 mil pesos, su cartera y su celular, ni menos nadie que diga que andaba con ella y hacerse responsable.
También los vecinos sostuvieron que Suero, quien llegó hace 3 meses de Alemania donde residía con dos hijas, les había hablado de su decisión de hacerse una operación, pero no sabían la hora ni el día.
Aclararon que era cierto que los familiares no estaban informados de su idea de operarse.
“Ella estaba por hacérsela y por no hacérsela, era como a escondidas de su madre y de su hijo. Entonces ella se fue con una amiga, pero no sabemos quién era esa amiga que le aconsejo que se la hiciera”, dijo la vecina Maritza Hernández.
Observó que el lunes bien temprano en la mañana ella salió y que al notar que no llegó, se preocupó al igual que los demás de la pensión donde estaba viviendo en Hato Mayor, y que se enteraron de su muerte a través de un hermano.
“Ella vino a hacer unas cuantas diligencias, como hacer una casita para dejársela a su hijo pero en eso ella habló de su operación. Lo que sí te puedo decir es que ella como que se deprimía mucho por todos los compromisos y todas esas diligencias con la casa que tenía que hacer, ya que supuestamente le cobraban mucho por construirla”, dijo.
Manifestó que era una mujer llena de vida, sana y que en los meses que la vio en la pensión era muy tranquila.
El cadáver de la mujer fue entregado anoche a sus familiares, y hoy será sepultada en el Cementerio Municipal de Sosua, de donde era oriunda.
El caso está siendo investigado por la Policía Nacional para establecer responsabilidades y establecer si se trató de una cirugía estética o de un crimen planificado.