Joven de Puerto Plata devora racimo de 30 guineos en 15 ninutos
PUERTO PLATA. En el barrio Cristo Rey, “nadie le disputa el mote de comelón a este joven, quien de una sentada engulle en lo que canta un gallo cualquier cantidad excesiva de comestible y si se descuidan repite más de una vez la misma cantidad de comida que le pongan delante”.La tarde del lunes último, Almonte montó un espectáculo en su barrio, luego de hacer una apuesta con unos amigos, ya que en menos de quince minutos devoró con un apetito feroz un “ramillete de 30 guineos maduros”.
No conforme con esto, Almonte se embizcó de un recipiente (biliguer) de una bebida gaseosa con el propósito de hacer más fácil pasar por su garganta esta gran cantidad de guineos.
Sin embargo, por estar de glotón, Almonte minutos después, debió ser llevado por parientes, amigos y vecinos al hospital público de Puerto Plata “Ricardo Limardo”, porque su estómago tuvo una reacción adversar al recibir esta descarga de los guineos.
En todo momento Almonte demostró un apetito voraz, imitando de esta manera al famoso personaje cómico “Cambumbito”, incluso la gran cantidad de personas que lo rodeó en ese momento le gritaba a coro: “sigue comiendo guineos, porque tu eres el campeón de los comelones del barrio Cristo Rey”.
Almonte llevó a cabo esta proeza en la parte frontal de la vivienda donde reside, la cual está ubicada en la zona Sur de la calle primera del sector Cristo Rey.
Las personas que conocen a “Richard, El Comelón”, aseguraron a redactores del periódico puertoplatadigital.com, “que éste acostumbra realizar apuestas en torno a que de un viaje se puede comer tres libras de espaguetis bien caliente, los que acompaña además de cuatro libras de yuca salcochadas, y si por algo hace falta, añade un litro de gaseosa”.
Revelaron que hace unos meses Richard fue llevado por sus padres a consultar un gastroenterólogo, porque sienten temor que por su apetito voraz, “muera a causa de una apoplejía”.
El médico que lo atendió, cuyo nombre se desconoce por el momento, determinó que Almonte tiene su estómago normal, por lo que no pudo determinar el por qué éste come tanto.