Polvillo de areneras y fábricas de blocks, constituyen un serio peligro para la salud pobladores de Barahona

Francisco Matos
BARAHONA. EL polvillo que emanan tres areneras y cuatro Fábricas de blocks que operan en diferentes puntos de esta ciduad y el que produce los embarques de yeso hacia el extranjero que realiza una empresa privada por el principal puerto local, es uno de los principales factores que contribuyen con la contaminación ambiental, que está afectando la salud de miles de personas, en especial niños y ancianos.

Esto ha motivado que los residentes donde funcionan esas compñías estén reclamando de las autoridades de los ministerios de Medio Ambiente y Recursos Naturales y de Salud Pública, gestionar con carácter de urgencia, el traslado de éstas a lugares fuera de la población, donde no causen daño a la salud humana.
Una de las tres areneras está ubicada en la esquina formada por las calles Tony Mota Ricart y Doctor José Francisco Peña Gómez, del sector Savica, en tanto que las otras dos se encuentran situadas en la avenida Casandra Damirón, una próximo al hospital regional universitario Jaime Mota y la otra, al otro lado frente a la entrada del barrio Palmarito.Mientras, que una de las fábricas de blocks se encuentra en la referida avenida, pero en la misma entrada a Palmarito y las tres restantes, están instaladas en el tramo carretero que enlaza a la urbanización Blanquizales con Villa Central.
"El polvillo que emanan las instalaciones y maquinarias de estas empresas, así como el que produce el yeso cuando es embarcado, se disemina por toda la ciudad, afectando grandemente la salud de los seres humanos", comentaron los dirigentes comunitarios, Juan Sánchez Hernández y Jenny Encarnación.Expresan que la la mayoría de los pacientes que acuden a las Unidades de Atención Primarias (Unaps), el hospital Jaime Mota y los centros privados de salud, padecen problemas respiratorios, lo que es atribuido por médicos al referido polvillo, por lo que amérita que las empresas sean trasladadas a lugares fuera de la población, donde no representen peligro alguno para los comunitarios.
Por su parte, los comunitarios Santos Rafael Joseph, Efráin Lafontaine y Minerva López Pérez, manifestaron que este problema se registra desde hace años, pero que las autoridades de Medio Ambiente y del Ministerio de Salud, nunca han puesto interés en el asunto, soslayando el peligro que este representa para los humanos."Reconocemos que esas empresas contribuyen con el desarrollo de Barahona y absorben mucha mano de obra desocupada, por lo que dejamos bien establecido que no tenemos nada contra ellas ni sus dueños. Lo que nos preocupa es nuestra salud y la de los demás, razón por la que abogamos sean llevadas a zonas donde no sean un peligro para la gente", sostuvieron.Llamaron a los directivos de la Sociedad Ecológica de Barahona (Soeba), así como a las juntas de vecinos, sindicatos, estudiantes, obreros, campesinos, profesionales, religiosos, amas de casa y al pueblo en general, a crear un movimiento de opinión, a fin de ejercer presión sobre las autoridades de Medio Ambiente y Salud Pública. para que desde ya comiencen a dar los pasos dirigidos a lograr el traslado de las referidas empresas a zonas fuera de la ciudad, donde no causen daño a la salud de la gente, y buscar solución a los embarques de yeso.
Consultada sobre la peligrosidad del polvillo para la salud de la gente, la doctora Pamela Medrano, expresó que la persona que lo inhala, puede ser afectada por una fuerte gripe que sino no se trata a tiempo, o se le da un mal trato facultativo, puede convertirse en asmática."Ya asmática, la persona tiene que ser sometida a un cuidadoso tratamiento médico, ya que de lo contrario puede complicarse su estado de salud y morir", dijo la profesional de la medicina que labora en el dispensario de salud del barrio Savica.
Por su parte, galenos del Jaime Mota coincidieron en señalar que en ese centro asistencial han nacido niños de madres residentes donde están operando los arenas y fábricas de blocks, con sus pechos congestionados, algunos de los cuales han fallecido, a pesar de los esfuerzos hechos por especialistas para salvarles la vida.Este periodista trató de tomar fotos más precisas de las referidas areneras y fábricas de blocks, pero todo fue infructuoso, debido a la actitud negativa de los guardianes y trabajadores de las mismas, como fue la de un obrero de la arenera situada a pocos metros del hospital Jaime Mota, el cual increpó de mala forma al comunicador social.
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