El martirio de estudiar en la UASD
Por: Anny Duarte
Desesperanza, impotencia, y frustración experimentan los estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), debido a los inconvenientes suscitados en el proceso de reinscripción para el semestre 2013-1, por el cual cientos de bachilleres permanecían desde las 8:00 de la mañana en las instalaciones de la biblioteca Don Pedro Mir, donde funcionan temporalmente las oficinas de registros, a espera de ser atendidos.
Las largas y extensas filas, ubicadas en la explanada y tercer nivel de la biblioteca, así como el poco personal que está laborando para solucionar los conflictos de proyección de materias y la identificación de las claves de acceso, provocan la lentitud del proceso y aumenta la desesperación del estudiantado.
En ese sentido, la estudiante de Psicología Clínica, Carolina Paniagua, manifestó indignada que tenía programado terminar en este año su licenciatura, pero debido a la insuficiencia de Registro para proyectar materias, tendrá que durar otro periodo.
Desesperanza, impotencia, y frustración experimentan los estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), debido a los inconvenientes suscitados en el proceso de reinscripción para el semestre 2013-1, por el cual cientos de bachilleres permanecían desde las 8:00 de la mañana en las instalaciones de la biblioteca Don Pedro Mir, donde funcionan temporalmente las oficinas de registros, a espera de ser atendidos.
Las largas y extensas filas, ubicadas en la explanada y tercer nivel de la biblioteca, así como el poco personal que está laborando para solucionar los conflictos de proyección de materias y la identificación de las claves de acceso, provocan la lentitud del proceso y aumenta la desesperación del estudiantado.
En ese sentido, la estudiante de Psicología Clínica, Carolina Paniagua, manifestó indignada que tenía programado terminar en este año su licenciatura, pero debido a la insuficiencia de Registro para proyectar materias, tendrá que durar otro periodo.
“Estoy cansada de que todo los cuatrimestres suceda lo mismo, poca materias para elegir o un horario dislocado; pero lo que más me molesta es que después dicen que uno es vago, que no viene a estudiar y por eso dura 10 y 12 años en la UASD, cuando la responsable de esta situación es la propia universidad”, afirmó categóricamente la futura psicóloga.
En igual tono se expresó el estudiante de Imágenes Médicas, José García, quien desde las 8:00 de la mañana estaba en la fila de la explanada de la biblioteca y pasada las 4:00 de la tarde esperaba subir al otro nivel, donde había más de 100 estudiantes antes que él.
“Es increíble, la inscripción la adaptaron al sistema de red para impedir las filas kilométricas que se hacían, pero al parecer no ha funcionado del todo, lo cual puede comprobarse al mirar a nuestro alrededor”, indicó García.
Asimismo, Ramón Díaz, empleado de la UASD y estudiante de Contabilidad, narró que las incomodidades son tan irritantes, que acudió a resolver un problema con su clave de acceso y le dijeron que en 24 horas podía inscribirse, pasado el plazo dado su problema persistía.
“Considero que la universidad debe hacer honor a su nombre de primada y solucionar esos problemas que la remontan a tiempos cuando todo era manual y la era de la tecnología no pensaba asomarse al país”, sostuvo Díaz.
La otra campana
Ante esta situación, el rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Mateo Aquino Febrillet, aclaró mediante circular y rueda de prensa, que no existe ningún caos con el proceso de reinscripción, sino que los inconvenientes que han tenido algunos estudiantes se debe a que no colocaron sus correos electrónicos correctamente para cambiar su clave de acceso.
Aquino Febrillet, insistió en que en los meses de octubre, noviembre y diciembre se les avisó por dirigentes medios a los bachilleres para evitar los obstáculos presentes; pero, no atendieron al llamado.
En cuanto al problema de proyección, concedió un plazo de una semana más para que puedan solucionar los escollos identificados, por lo cual las clases ahora iniciarán el 22 y no el 14, como se había programado.
De igual forma, reconoció que el sistema informático se sobrecarga con facilidad, debido a que más de 180 mil alumnos se inscriben y los equipos con que cuenta la institución no son suficientes, por lo que pidió paciencia y compresión, puesto que el problema de inversión financiera todavía no se ha aplicado, con el cual pretenden acabar con ese tormento.
/Fuente: Dominicanos HOY/